Asistiendo a la opera

Eran las 11 de la noche aproximadamente, desperte en un extraño lugar, un hotel quizas mi ropa se encontraba rota, mis zapatos habian desaparecido, Hide habia vuelto a tomar el control, me levante del suelo, reconoci la habitacion se trataba de un apartamento el cual frecuentaba ultimamente, al levantarme me dirigi al espejo del baño para poder arreglarme pues no queria parecer un pobre, al mirarme en el espejo me di cuenta de que los efectos de mi elixir todabia no habian desaparecido, mis ojos eran los de Hide, al mirar mas atentamente en el espeho vi aquel horrible ser, el cual me hablaba.

Hide- Hola Henry. Que tal has dormido ?.

Su voz martilleaba mi cabeza yo le respondi.

Jekyll- Hide que as echo esta vez ?

Pregunte al monstruo pero este se esfumo desvaneciendose, suspire para relajarme, pues lo necesitaba de alguna manera no sabia que atrocidad habia cometido Hide, pero intente no pensar en ello, de un cajon saque unas entradas para la opera, eso me ayudaria a relajarme ademas me agradaba el dulce sonido de los instrumentos.

Llegue al teatro la opera que fui a ver tenia el titulo de O Fortuna, gran obra dije para mis adentros mientras presente mi entrada al vigilante, pero siempre ocultando parcialmente mi rostro con un elegante sombrero de copa, mi ropa parecia cara pues para asistir a la opera me vesti elegante.
Al entrar al teatro obserbe una butaca libre, sonrei ligeramente mientras me acomodaba en aquel sillon y espere pacientemente a que empezase la opera.



[off rol] No hagan caso del video solo de la musica que representa la opera que estoy viendo.

Por primera vez quias, el conde viajaba solo, mejor dicho, vagaba. Deambulando por las calles vestido como el desgustaba, pantalones de cuero ajustados, botas con amarras, una especie de chaleco viseccionado color grisaseo, algo más oscuro, sus cabellos peinados hacia atras, su frente mostrando aquella cruz en ella, marca algo extraña y finalmente su infaltable abrigo azulino con pelajes blancos en los bordes.

Sus delicados pasos legaron hasta la enrtada, pasando su voleto de permiso a entrar a el espectaculo que se presenciaría. Desgustaba bastante de aquellas obras y aquella simplemente fascinante musica que ofrcian aqui en este hermoso pais. Llegado a una butaca resientemente donde se había sentado un cabalero, quedaba unico asiento libre al lado de este. Con permiso, espero no este reservado . Dijo caballeroso y hasta con gracia de que el hombre de sombrero le diera cabida para senatrse junto a el.

Muuuchisimas gracias. Canturreó el duque ante el cortes gesto de su ahora, acompañante en dicha función. Caminó hacia lo que fue el asiento y acomdoadndose echando el abrigo hacia adelante apegandolo a la parte trasera de sus muslos, quedo sentado comdoamente, listo para el espectaculo.

¿ Por qué tan nervioso ? Dijo de pronto dandose cuenta de la forma de comporatrse del hombre a su lado. Su voz era casi melodiosa y su expresion tan simple como indescriptible. Oh, disculpe. dijo haciendo un ademan con su mano alzada por quizas parecerle inoportuno ante hablarle sin siquiera presentarse. Mi nombre es Lucifur, Kuroro de Lucifur, me es extraño que un caballero de tan buena pinta esté algo nervioso antes de un evento tan relajante y maraviloso como lo es la opera.

No, no es malo el que haya escuchado de una mansi...- No terminó su comentario cuando empezó la obra, a lo que solo le sonrió al caballero a su lado y ealizó un getso acial para que quizas coversaran en el intermedio de tema y tema o cuando acabara la obra. Fue imposible no pecatarse de aquellos poros sudadoresen sus manos, aquel claro sentimiento de suma inquietud de parte de Jekyll le llamó la atención totalmente aunque con cierto disimulo, solo su seño se fruncía y su mirada de reojo captaban cierta inquietud y algo sumamente.. extraño en él.

Era claro que no se sentía bien, no gastaría tiempo en una pregunta tan estupida como preguntarle su estado. ¿ Nesesita salir o... O algo ? susurró tomandole el brazo como quizas gesto de entrega de confianza. No podría disfrutar dle espectaculo si tenía a un hombre con mal estares tan notorios a su lado.

Sus ojos se afilaron ante el decir de Jekyll, definitivamente algo pasaba pero bueno, no era quien para meterse en la vida de alguienasi como asi, aunque no podía eviatr que algo le llamase la atención de dicho caballero, tal vez debería de enrtablar más conersación con el. Ademas siendo la epoca, que tipo de hombre o dama se resistía a entablar conversación amistosa y desinteresada con un noble ? Más si aquel era algo.. especial. Le asintío soltandole el brazo y acomdaondose un poco, disimuladamente en silencio,seguriría atento a las acciones y espasmos del hombre, sin duda, descubriría que le llamaba la atención de este.

Pasados los tiempos de angustia, e conde se levantó de su asiento y comenzó a aplaudir con una sonrisa tranquila y quizas no tan satisfecha como esperaba, pero si le daba gusto almenos ver a su ahora acompañante mejor y que ubiera desgustado en lo posible del espectaculo.

¿ Gustaría el acompañarme un momento señor Jekyll ? Me gustaría poder disfrutar más de la compañia de su persona. Dedicó una sonrisa al hombre y le realizó un admean de invitación con su mano derecha. Su actitud era bastante de fiar en aquellos momentos, muy tranquila, pacifica, sumamente agradable.

Feliz por su respuesta, e sonrió una vez más hasta salir juntos del teatro, junto con uno que otro citadino a iluminarse a las calles de afuera en una noche que apenas comenzaba a vivir.

El conde pensaba quizas en una cena o algun simple cafe o trago para pasar un rato agradable, pues la gente ya empezaba a mrarle y balbucear cosas que quizas, se volverian molestas más adelante. ¿ A que se dedica, Jekyll ? Dijo comenzando a caminar y para poner un tema mientras caminaban a algun lugar del cual no se desidía aun.

Su expresión quizas parecía algo fingida, pero simplemente era expontanea. Su rostro se desvió a mriarle y sus ojos se cerraron casi roboticamente junto a una sonrisa que no tardó en desaparecer. Ya veo. Dijo con voz alegre aunque baja.

Pues, verá, doctor Jekill, si me permite llamarle así.Aclaró un poco su garganta llevandose la zurda a esta y acariciandose por mera maña. Como usted me dijo saber, si, tengo una gran mansión y ... estoy buscando personal interesado, sirvientes, mayordomos... Realizó una deman con la zurda como diciendo "etc" Renovando personal. Y me llama mucho la atención usted, Jekyll, rara vez tengo corazonadas con la gente que trato, y creo usted uede tener "algo" de sumo interes para mi incluso espiritu.

Mis oidos no me engañaban ciertamente me estaba ofreciendo trabajo, alegre mi rostro lo que pude pues pense que al volver a Londres seria perseguido cual animal, pero no fue asi este agradable joven que estaba frente a mi me estaba ofreciendo un puesto de trabajo con lo que respondi.

Sera para mi un placer trabajar para usted señor.

Dije con una ligera reverencia sosteniendo aquel sombrero que portaba, entonces me volvi a dirigir a el.

Aunque si no le es molestia, me agradaria instalar un laboratorio pues mi oficio requiere uno.

Espere una respuesta de aquel joven y quede un momento frente a el esperando oir su voz.

[off rol] No te preocupes el Laboratorio ya esta puesto solo te lo digo para que sea mas real ^^

( Si lo vi, no hay problema mientras no hagas explotar la mansion (?) )


Podría considerarse quizas algo "fresco" o apresurado el pedir algo al conde cuando aun no se cerraba siquiera trato alguno. Pero le agradaba, le causaba gracia aquella timidez retriada del doctor. Un laboratorio... Si, suena interesante. Dijo quizas en un tono como algo regodion, que si lo era en realidad.

Llegaron a un modesto restaurante y tras sentarse comdaomente en lo que fue un rincon del lugar, el conde invitó al doctor a pedir lo que desease, más el solo pidio un filete con alguna ensalada sutida, un buen vino y nada más. Pida lo que desee, Jekyll, yo invito. Sentía curiosidad por cada detalle , aunque siendo shinigami, tenia alguno que otro registro del doctor, era distinto leer un poco de alguien a simplemente tenerlo en ftente y analizarle, descubrirle por cuenta propia.

Era como una subasta, la palabra favorita del duque en secreto. No podía evitar reirse ante las dicahs, aunque s, podría dejarle invitarle, era modesto quzias y no hallaba razon para que si se tenía dinero, debíera de gastarse gran cantiad en cada cosa que hacia. Hagamos algo, pagamos mitad y mitad de la santa cuenta ¿mMM...? Ciertamente, muy buen humor era el que tenía el conde aquella noche, como no en todoc aso si estaba con un agradable caballero de cual bestia interna tenia sumo interes, y había presenciado una hermosa ctuación aí en la opera.

El conde no agregó nada más, el mesero se retiró a esperar la preparación de la orden y dejo a ambos hombres solos en la mesa con una panera y algunos agregados pocos para desgustar mientras se preparaba el pedido.

Kuroro le hablaba a al doctor de las reglas de la casa como si ya fuera seguro el contratarlo, aunque calro,él era un doctor mas que un sirviente,pero le serviria en casa, más aun con personal que de seguro en un tiempo, tendria nesesidad de alguien que curara y cuidara de ellos. Le habló de Kurai, uno de los sirvientes, un chico agradable y algo timido, pero se veia esforzado, Zamantha, una hermosa musa de rojos y largos cabellos, buena cocinando y bastante agradable.Buscaría mas sirvientes, ya que nesesitaba la mansion estubiese siempre atendia, aunque claro,nunca le dijo que tambien le importaba aquel musculoso problema que el doctor tenía.

Finalmente la orden llegó, fue servida apra ambos junto a las bebidas y el camarero se retiró dejandoles desgustar.

Desgustaba de sucomdia quizas muy simplepara alguien noble, pero que mas daba si asi era feliz. Lo que si no podí negrase de caldiad suprema era el vino que compartía sin pudor con su acompañante como si fuese un conocido de toda vida o algun invitado de honor.

Pues la verdad solo es tener unac asa mas grande de lo normal, con mucha gente adentro que no nesesariamente es la familia, aunque terminan siendolo. Y... lujos y todo eso pero no asegura felcidad, señor Jekyll. Contestó con la más absoluta simplesa, puesto era su forma de pensar. Levantó su copa como brindando por aquello y bebió un trago de aquel buen vino que había pedido.

Le asintió a su dicha de ir a lavarse, él se quedó terminando su simple cena, a veces ahciendo pequeños e inevitables juegos mudos con la comida. Como una maña envolvía un trozo de carne en una pequeña hoja de lechuga como si fuese una franja verde y luego se la llevaba a la boca, una simple maña. Bebió un ultimo trago de vino antes de que un grito atronador le hiceira en un principio sorprenderse, pero cuando el camarero voló por los aires y la pared se destrozó, una fina sonrisa se iguró en los labios del conde. Te tengo. Susurró.

¡ Señor Hide ~ ! Canturreo icluso entre risas como cual pelicula del psicopata tras otro psicopata en curso. ando un aplausocon sus manos, arreglandose el abrigo y caminando hasta unos dos metros de distancia del enorme hombre. Hace mucho que le busco, aunque... honestamente no esperaba saliera despues de la cena. Sinica risa corta salio de la boca del conde antes de que sus manos se dirigieran a atras de su espalda, una de estas se abrió minusiosamente en posicion de agarre y hacia arriba como si sujetase algo, y efectivamente asi era. Me gustaría entablar una charla con usted¿ sabe ?

La gente abandonaba el local, los ultimos algo extrañados pues alguien importante al parecer quería suicidarse poniendose frente a aquel monstruo.